Amores compartidos… o ¿la fórmula del amor en el 2025?… | Reseña
Escrita por: Alberto Castro
Lo que parecía que no sería una comedia romántica más en pleno verano del 2025, terminó siéndolo, y no solo eso, sino que sin lugar a dudas es una de las mejores cintas del año.

Y no es gracias a su guión sencillo o a las actuaciones de su elenco totalmente comprometido, sino que todo en “Amores compartidos” funciona como engranes de una gran locomotora y hace que el producto final sea quizás sino la mejor comedia del año, una de las mejores.

La cinta inicia con la pareja conformada por Ashley y Carey discutiendo el futuro de su relación cuando abruptamente la chica lanza la bomba de que quiere separarse. Tal comunicado le cae como balde de agua fría a Carey quien a partir de ese momento cae en una espiral de situaciones que parecen sacadas de la mejor teleserie de comedia de los Estados Unidos.
Cuando todo parece perdido, Carey encuentra en Julie (la esposa de su mejor amigo) un consuelo inédito y una sensación que hasta el momento el desconocía, lo que lo hace replantearse lo que quiere en la vida y lo que está buscando en una pareja.

A partir de esto, las vidas de Ashley, Carey, Julie y el mejor amigo Paul dan un giro de 180 grados y empieza una telaraña de vaivenes que no hace mas que empeorar la situación de maneras hilarantes que uno como público en verdad agradece.

Tanto la fotografía, como la ambientación, la música y el talento están en un punto inmejorables y hacen de Amores Compartidos un must see del año, pues pocas veces, y realmente pocas veces podemos apreciar productos tan perfectamente cuidados, y esto es algo que seguramente tiene que ver su escritor, productor y hasta protagonista Kyle Marvin quien se encargó de que cada detalle estuviera a las expectativas de su visión, una cinta que se presenta como una “no comedia romántica” independiente, que seguramente dará mucho de que hablar.
