DogMan
Título original: DogMan
Año: 2023
Duración: 114 min.
País: Francia
Dirección: Luc Besson
Guion: Luc Besson
Reparto: Caleb Landry Jones, Jonica T. Gibbs, Christopher Denham, Clemens Schick, Michael Garza, Corinne Delacour, Grace Palma, John Charles Aguilar, Lincoln Powell, Marisa Berenson, James Payton, Bennett Saltzman, Derek Siow, Avant Strangel, Luing Andrews, Adam Speers, William Sciortino, Bianca Melgar, Naïma Hebrail Kidjo, Hatik.
Música: Eric Serra
Fotografía: Colin Wandersman
Compañías: Europa Corp, TF1 Films Production, Ondamax Films
Género: Drama.
Dogman pudo haber sido un filme de inicio de algún villano o antihéroe directamente salido de las tiras cómicas, lamentable este no es el caso, pues es un drama disfrazado de thriller sin pies ni cabeza que no llega a ningún lado. Esto sorprende mucho debido a que su escritor y director Luc Besson ha hecho grandes joyas de la cinematografía como lo son: León (El perfecto asesino), The fifht Element (El Quinto Elemento) o The Messenger: The Story of Joan of Arc (Juana de Arco), por solo poner algunos ejemplos, es por eso que resulta increíble que su más reciente trabajo resulte en un vomitivo narrativo ya que no es un principiante.
El filme narra en casi 2 horas la vida de Douglas Munrow, que es brillantemente interpretado por Caleb Landry (The Last Exorcism (El Último Exorcismo), Get Out (Huye), The Forgiven (Los Perdonados)), desde una traumante infancia que bien puede alcanzar el nivel digno de un drama griego, sin embargo en el segundo acto, empieza una narrativa ridícula, inconexa y con falta de contexto de cómo esta persona tiene una jauría de perros y atravez de ellos se convierte en vigilante y ladrón.
Sinopsis: Maltratado por su padre y encerrado en una jaula con perros durante su infancia, Douglas (Caleb Landry Jones) crece en búsqueda de su libertad y justicia como un vigilante del vecindario con un ejército de perros a sus órdenes.
La dirección de Besson por fortuna es mejor que su propia pluma en este caso; aquí lo que duele ver es a talentosos actores desperdiciados, la fotografía es buena pero la edición no lo es pues por momentos olvida la propia historia en cuestión de secuencia, el soundtrack es bueno con canciones clásicas y una música instrumental a base de cuerdas para intensificar los momentos dramáticos.
La cinta intenta abordar varios tópicos como el religioso, un melodrama, el inicio de un justiciero urbano o un villano a según se quiera ver y un retrato animalista, y entre tanta tela de donde cortar no logra explotar de manera adecuada ninguno de ellos, en vez de eso muestra una historia plana e inverosímil, pretensiosa en algunas partes técnicas. Probablemente pueda ser una de las favoritas para los amantes de los perros, ya que estos animalitos son las verdaderas estrellas de la película y logran robársela.